Por Korko Camacho
Con la victoria del domingo sobre los Bengals los Steelers consiguen su segundo objetivo de la temporada: Ser líderes divisionales. Queda uno antes de la meta, primero hay que ser campeones de la AFC, para posteriormente llegar a la meta que es ganar el Super Bowl. A inicios de temporada hubiera sonado una meta poco probable, pero al entrar a los playoffs como líder divisional las posibilidades son las mismas para todos. Así que vamos por ello.
Decía John Facenda «Los grandes equipos no son grandiosos siempre, lo son cuando tienen que serlo» Y eso es lo que mostraron los Steelers el domingo pasado. En un partido donde la adversidad fue cada vez mayor encontraron la forma de asegurar la victoria con jugadas clave. Un fumble ocasionado y recuperado en el momento clave, un pase de TD en el momento clave, una captura en el momento clave. Este es el comportamiento de un equipo que puede ser campeón, y los Steelers lo tuvieron el domingo pasado.
Inicia la última etapa de la temporada, la etapa donde hay que jugar al 100% en cada pulgada del campo, la etapa donde un error te puede poner fuera de la contienda y donde la concentración debe ser absoluta. Los Steelers llegan como un equipo en ascenso, una «banda de hermanos» que han sabido apoyarse unos a otros, un equipo a determinado a que su fortaleza como equipo sobresalte a las debilidades individuales de jugadores jóvenes. Un equipo que puede derrotar al rival que le pongan enfrente.
¡Here We Go Steelers!
The Pittsburgh Steelers en Español 